“Nuestro pueblo es heroico y siempre ha reconocido a nuestros mártires y líderes y con ellos hemos luchado, hemos resistido y hemos vencido. Nosotros los artistas representamos el sentimiento, la expresión y la memoria de la existencia del pueblo, pero también somos los laboriosos guardianes y combatientes permanentes de la vergüenza, la dignidad y el honor de su existencia”.
Tal afirmación fue hecha por el prolífico pintor, grabador, ceramista, diseñador y dibujante Agustín Antonio Villafaña Rodríguez (Yateras, Guantánamo, 13 de junio de 1952), en estos tiempos de reafirmación patriótica frente a las amenazas de desestabilización de la Revolución Cubana orquestadas y dirigidas por el gobierno norteamericano y la mafia miamense.
“Estaremos siempre dispuestos —dijo Villafaña—, con valentía, decisión y coraje a proteger la dignidad, la moral y la justicia de nuestras conquistas. Los provocadores pro-imperialistas solo conseguirán, el repudio del pueblo hacia los traidores”; dijo el destacado creador de las artes visuales, director general del estudio- galería Casa Yeti (Casa Verde).
Al reflexionar en torno a las recientes revueltas, el también miembro de los consejos nacionales del Sindicato de la Cultura —del que es fundador y asesor desde el año 1977—, de la Central de Trabajadores de Cuba y de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), enfatizó: “Somos profesores, educadores y militante de la Vanguardia de la Paz, de la tranquilidad y el bienestar de nuestra ciudadanía, porque aquellos que atenten lo mismo de afuera que de adentro no podrán dañar, perjudicar y mucho menos, poner en peligro la existencia de nuestra familia, barrios, comunidades y ciudades.
“Queremos patentizar —agregó— que los más de 300 creadores de la Comunidad Artística de la Casa Yeti y en el mío propio, manifestamos nuestro apoyo como siempre con y para la Revolución, somos parte de nuestro pueblo y contaran con la energía, la vitalidad y nuestra posición ante cualquier situación que atente y perjudique a la Revolución Cubana”.
Igualmente fundador e integrante de otras instituciones culturales como el Grupo de Cerámica Contemporánea Ky-13, 2015, el Centro Latinoamericano Altamira, en Chile, la Asociación Hermanos Saiz —de la que es miembro de honor—, del Fondo Cubano de Bienes Culturales y de la Asociación Cubana de Artistas Artesanos, Villafaña exclamó que “ahora más que nunca debemos estar unidos, preparados e invencibles, porque la Patria nos necesita y este pueblo nunca será derrotado mientras quede un cubano libre, revolucionario y digno. ¡Siempre seremos más, Cuba es de los cubanos¡”.
El destacado artífice reafirmó su condición patriótica y revolucionaria en un “momento difícil de recogimiento social, cuando debía de mantenerme en casa, y además, de la edad y las limitaciones que imponen los procesos de crisis de las enfermedades: cardíacas, pulmonar, hipertensión, reumatológicas, alérgicas, entre otras, la situación por la que transito no ha impedido las motivaciones, las iniciativas, los impulsos creativos, el florecer de los oficios y las tareas de mantenimiento; ahora con énfasis prioritario en la defensa de las conquistas del Socialismo”.
Villafaña es acreedor, además, de la Distinción por la Cultura Cubana y del Premio Nacional Olga Alonso por la Obra de la vida, como profesor, instructor y artista plástico, posee obras en importantes museos y entidades de Italia, Venezuela, Chile, Estados Unidos, México, Argentina y Cuba; así como en colecciones privadas e institucionales de más de 20 países.
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