El circo con su magia, es un arte que ha crecido en el tiempo, y en el que convergen muchas manifestaciones que se entrelazan para entregar un espectáculo singular. Ya sea en trabajos de grupo, como solistas, en dúos, tríos, los artistas se transforman en malabaristas, acróbatas, contorsionistas, gimnastas, trapecistas, magos, …, y van narrando —con sus movimientos y acciones-— estas historias o diminutos “poemas” circenses, donde transpira la poesía del cuerpo, conjugado con la danza, la pantomima, el teatro, el humor, y tantas más cosas…

Las artes plásticas, son, ahora un espejo donde podemos ver, pasado por el tamiz de cada creador, el circo en imágenes. Por eso, un grupo de alumnos y profesores/creadores de la Academia de San Alejandro, que en el 2018 llegará a su Bicentenario, quiso rendir homenaje al “viejo” amigo del Hombre, en este CIRCUBA 2016, que reaparece cada verano para alegría de todos. Pero con un sello de originalidad.

Durante la inauguración del 15to. Festival Internacional de Circo CIRCUBA 2016 quedó inaugurada la muestra Diminutos poemas circenses, en el vestíbulo de la sede principal del encuentro: el Centro Cultural Carpa Trompoloco (calle 112 y 5ta. Avenida, Miramar). En estos trabajos despierta el antiguo arte circense, en mil y una maneras llegadas desde lo más recóndito de la imaginación, pues ha sido tomado como inspiración para llevarlo a piezas bidimensionales o tridimensionales que le harán soñar desde la tela o los papeles, transmitiendo, a través de tonalidades/formas, pasión, energía, audacia, creatividad, emoción..., lo que los intrépidos artistas del circo nos hacen sentir en ese mundo de ensueño en una pista redonda multicolor.

Retozando, esta vez desde las imágenes, con sus criaturas, que indudablemente provocan muchas ideas en el espectador, y, por qué no, nuestra vocación interpretativa; nos sorprenden los personajes y las creaciones que alcanzan dimensiones inusitadas al dialogar en la obra con la línea, la mancha, el gesto, una aguada, texturas infinitas, y los materiales utilizados. Imaginativos encuentros sobre las superficies en las que podrán descubrir, los espectadores, a través de una transparencia, quizá, realidades vividas en el instante supremo de hacer estallar la fantasía o la emoción recogida en cada salto o movimiento del artista circense que aquí recupera otro arte para hacerlo vivir eternamente.

Muchas historias entretejidas en circo se posan, pues, sobre acrílicos, óleos, crayolas, creyones, y se entremezclan en telas, cartulinas, papeles, …, en una simbiosis que regala instantes extraídos de ese tiempo mágico, en que la realidad se vive con intensidad, donde vuela la imaginación y la verdad, para sacarnos y llevarnos a otra dimensión que se acerca a los sueños…

La magia del circo y de las artes plásticas tocan puntos comunes, se mueven por vasos comunicantes y nos vuelven a hacer pensar desde esta amplia galería creativa, que desborda el estrecho marco de la imaginación y también del cuadro, el objeto escultórico…, para hacernos vivir otra vez el Circo con sus emociones, la carga de vitalidad, colorido, destreza, perfección…

Los cuerpos flotando en el espacio, los disímiles personajes, animales que aportan atractivo a los disímiles números de doma o los ejercicios que dejan boquiabiertos al espectador; se traspolan ahora a las líneas y formas y colores, en saludo a un arte mayor que está cerca del Hombre y sus íntimos anhelos.