“Un día se apareció un señor que era profesor y escritor. Había escrito un cuento de Hadas que llamó azucena y quería hacerlo con las niñas:  -Yo era como una lagartija flaca, con un chorro de voz increíble, no compaginaba, no tenía nada que ver con aquella cosita. Las protagonistas eran las mayores-  A mí se me asignó un personaje de un varón, que era un médico loco, arrebatado. Éramos dos médicos, una escena simpática, dentro de la angustia del príncipe que se moría de amor”

Con la simpatía que la caracterizaba describe su debut quien se convertiría, al pasar el tiempo, en uno de los más carismáticos rostros que recuerda la Televisión Cubana la actriz, locutora, modelo de comerciales y conductora de la Radio y la Televisión, Margarita Balboa.

Una suerte de añoranza y regocijo nos provoca recordarla por esa proyección diáfana, elegante y atractiva que tanto disfrutó el público cubano.

Esta mujer, merecedora del cariño de todos, nació en la Habana un día como hoy 15 de noviembre del año 1930 con una estrella que irradió su luz hasta dejarla en el recuerdo de su pueblo.

Como todas las grandes artistas, desde niña estudió Canto y Ballet en la escuela de Caguayo donde tuvo a compañeras como Amelita Pita y a Omara Portuondo. Estuvo en la Academia de Arte Dramático y colaboró con el grupo Patronato, fundado en 1942, donde tuvo la oportunidad de interactuar con grandes del teatro de la época como la actriz cubana Cuqui Ponce De León. En esta agrupación conoce y representa grandes obras del teatro clásico y otras que describían el contexto y la realidad del cubano entre las más recordadas: “El que dirán” y “Lo que no se dice”.

Sin embargo, también se recuerda de esta actriz cubana su figura delgada, vivaz y con un torrente de voz increíble la cual aprovechaba en escena imprimiendo una simpatía singular a cada presentación.

Como actriz, Margarita de Balboa o Margocita, como cariñosamente le decían, debuta nada más y nada menos que en una puesta musical escrita por el destacado compositor cubano Gonzalo Roig, en lo que es hoy el teatro García Lorca, en aquella época Teatro Nacional. Como locutora tuvo la oportunidad de estar en los momentos fundacionales de la Televisión en Cuba, liderada por Gaspar Pumarejo el 24 de octubre de 1950, pues se convirtió en la primera voz e imagen femenina que irrumpe en la pequeña pantalla de los televisores que se situaron en las vidrieras en la ciudad de La Habana.

El histrionismo de esta artista de la Radio y la Televisión se hizo visible en el espacio de Telenovelas, primero, bajo el liderazgo de Raúl Solís en “Yo quiero ser madre”, mientras que sostenía sus trabajos en la radio en un programa estelar que dirigía el destacado realizador Roberto Garriga llamado “Estrellas de Ultramar”.

Muchos son los espacios que se engalanan la Radio y la Televisión cubanas donde la presencia de Margarita Balboa aporta un valor especial.

De la Radio, su amplia participación en los principales espacios dramáticos: “Tu novela de amor”, “Agente especial”,  y “Clave 8:30” de Radio Progreso y en Radio Taino.

Entre sus novelas recordamos “El siglo de las Luces”, “Ana Karenina”, “Madame Bovary”, “Las impuras”, “Las honradas” y “La comedia del domingo”.

En el Cine también dejó su huella en la película El otro Francisco, junto a destacados actores como Alina Sánchez, Ramoncito Veloz, Adolfo Llauradó, Alden Nihht y Armando Bianchi.

En un aniversario más de su natalicio recordemos a Margarita Balboa, una de las voces más representativas de la Radio y la Televisión cubanas. Premio Nacional de Televisión Premio Micrófono de la Radio, Premio a la mejor actriz de la Televisión entre otros reconocimientos, entre los que cuentan dos de los más importante en la vida de un artista: El Cariño y la admiración de su pueblo.