Más de 100 maneras de ver al Che
El abordaje de Ernesto Guevara, desde el tratamiento gráfico, constituyó materia fundamental para la conferencia 101 carteles del Che o cómo representar lo insondable que, con motivo del 56 aniversario de la desaparición física del Guerrillero Heroico, impartiera el diseñador Pepe Menéndez, Premio Nacional de Diseño 2022 y director de Diseño de la Casa de las Américas, lugar donde se desarrolló la actividad. El encuentro estuvo presidido por Abel Prieto, Presidente de esa institución.
Prolífera, variada e intensa, ha sido la producción cartelística sobre el Che, la mayoría luego de su muerte, pues en vida, pocos fueron los carteles realizados con su imagen. Tuvo un tiempo relativamente corto para las fotos antes de su partida a Bolivia. Varios ejemplos de esa etapa fueron expuestos por el conferencista. Sin dudas, la foto que lo volvió ícono gráfico, fue la tomada por Alberto Korda, en ella deja de ser esa personalidad real para convertirse en mito, “se convierte en imagen gráfica, en transcripción al cartel e ícono gráfico, en símbolo”, subrayó Menéndez.
Carteles del Che, Pepe Menéndez, Casa de las Américas
Es en 1968 con el cartel que se realizara para el Congreso de la OSPAAL, la primera vez de su figura en la impresión gráfica, pasa a ser una imagen gráfica. Ahí está la enorme valla a un costado de la Plaza de la Revolución con su rostro, en el edificio del Ministerio de Comunicaciones, basada en la foto de Korda. Comienza su multiplicación gráficamente.
“Esto tiene ciertas reglas y recursos del diseño”, dijo respecto al cómo se trabaja la imagen del Che. Lo analiza y compara con el tratamiento del diseño en la figura de Fidel y Martí. En el caso de Fidel se ha usado su rostro, acompañado de alguna frase para enfatizarla; mientras a Martí se ha abordado desde la famosa foto tomada en Jamaica, donde aparece de pie y las manos detrás del cuerpo.
En cambio, según Menéndez, al Che se le trabaja desde su imagen, “era un personaje muy fotográfico”, señaló. La mayoría de los grafistas han utilizado su rostro con los múltiples recursos que posibilita el diseño, entre ellos, la metáfora visual, la abstracción con un pequeño referente conceptual; los recursos fotográficos puros como el collage de fotos en una sola pieza; puntos, rayas en blanco y negro o a colores, pixelado, degradación cromática, la utilización de los picos de la estrella de su boina, etc.
Dentro de los nombres que han hecho representaciones simbólicas e interpretado con infinidad de mensajes sobre el Che, mencionó a los diseñadores Félix Beltrán, Raúl Martínez, Perfecto Romero, Chinolope, Osvaldo Salas, Liborio Noval, Nelson Ponce, Santos Toledo, entre otros. Todos ellos, dijo, han utilizado sus ojos, la mirada a la cámara, al horizonte; su caligrafía, entre otras.
Advirtió que la figura del Che, contradictoriamente de haber sido un guerrillero y haber optado por la lucha para alcanzar la justicia, poco ha sido tratada desde el cartel vinculada a las armas. Puso ejemplo de estos carteles. Sin embargo, se acentuó, según Menéndez, al Che como impulsor del trabajo voluntario, de la práctica del ajedrez y tantas otras batallas ideológicas que libraba.
Detalle Importante recogido en la gráfica y al que el exponente prestó especial atención, es el Che en su dimensión latinoamericana y mundial como multiplicación de su ideario de libertador. Varios carteles reflejan su rostro cubriendo al continente latino o la boina iluminando a esa zona geográfica y así múltiples maneras de abordarlo gráficamente.
Carteles del Che, Pepe Menéndez, Casa de las Américas
También refirió que, las primeras representaciones de la imagen del Che desde la multiplicidad de discursos, exaltaban la figura, su legado de pensamiento, dentro de la pérdida física del Guerrillero Heroico. Luego cambiaría esa percepción con la aceptación de su muerte, aparecerían carteles con su rostro sonriendo.
Dentro de los carteles que, según su punto de vista, tienen un valor y significado importante, está el realizado por el diseñador René Azcuy en 1971, cartel poco conocido que muestra un Che portado por alguien con el puño cerrado y que evalúa como “al Che como estandarte, lo abre a la comprensión de su legado”.
En el encuentro fue comentado el libro 100 carteles del Che, volumen que recoge igual cantidad de carteles de dos importantes colecciones: la del artista y diseñador Damián Viñuela y la del propio Pepe Menéndez, ambos compiladores del texto. Cerrado e impreso el libro, apareció un cartel poco conocido de Olivio Martínez y ambos compiladores desearon agregar. De ese cartel se imprimieron varios ejemplares que fueron donados a la Biblioteca Nacional de Cuba José Martí, la Casa de las Américas y el Centro Che Guevara.
Fotos@Juan Carlos Borjas/Periódico Cubarte
Deje un comentario