Como cada creador, seguramente Pastor Vega (La Habana12 de febrero de 1940-2 de junio de 2005), pretendería realizar una obra trascendental cuando concibió y rodó su multilaureada cinta Retrato de Teresa, (1979) pero también, quizás, tuvo la esperanza de que perdiera vigencia con el paso del tiempo, en tanto debían resolverse los problemas estructurales que denunció en su discurso cinematográfico.

No es así; Retrato de Teresa sigue vigente  «y coleando», faltamente, pues el patriarcado, el machismo y muchas de sus consecuencias aún pululan por las calles, casas, y lo peor, instituciones laborales en Cuba.

Fue valiente Pastor Vega, un gran fotógrafo que logró un gran retrato; visionario agudo que demostró haber calado bien abajo en la idiosincrasia cubana.

Pastor Justo Damián Vega Torres,  adquirió desde  su hogar, una estrecha relación con el arte; su padre, fue el aplaudido repentista Justo Vega, quien junto a Adolfo Alfonso, constituyó un inolvidable dueto, pocas veces superado en estas lides tradicionales.

Vega entró a la cultura artística por el camino de la actuación, al ingresar  en noviembre de 1958   en el grupo Teatro Estudio, fundado y dirigido por los hermanos Raquel y Vicente Revuelta; luego se desempeñó como actor en   películas como La Decisión de José Massip, y Un día de trabajo, producidas por el Instituto Cubano del Arte e Industrias Cinematográficos del cual fue fundador; más tarde allí fue asistente de dirección en varios documentales y largometrajes, hasta que en el año 64, pasa a ser director de documentales, los cuales constituyen una larga lista de temáticas variadas, donde resalta el largometraje documental histórico ¡Viva la república!,  de 1972, su primer destaque como realizador y devenido clásico   de la cinematografía cubana.

En cuanto a los largos de ficción, no es que Retrato…. haya sido lo único loable, pero el impacto de esta película fue grande al poner al desnudo una realidad cotidianadesde un prisma diferente: el poder del arte en la mente de la gente, que de pronto se vio inmersa en una inédita polémica que puede perfectamente revivir con una nueva proyección popular del filme, porque los públicos cambiaron pero el problema, con algunas variaciones,perdura.

Retrato de Teresa fue muy reconocida por la crítica cinematográfica tanto en Cuba como en varias naciones; conquistó  Premio de largometraje, y de Producción en el primer Concurso de la Sección de Cine, Radio y TV de la UNEAC, en 1979; seleccionado entre los filmes más significativos de ese año en la Selección anual de la Crítica en Cuba; Premio del Comité de Mujeres Soviéticas, del XI Festival Internacional de Cine de Moscú; Mención especial del Jurado, en el IX Festival Internacional de Cine Huelva,  en España;   Segundo Premio (otorgado por el público), en la Semana Internacional de Cine de Autor de Benalmadena, España, y  Filme notable del año, en el Festival de Londres,Inglaterra, 1980.

Para su musa, Daysi Granados, Premio Nacional de Cine2007, su esposa, estuvieron destinados varios lauros por su extraordinario desempeño: Premio a la mejor actuación femenina en XI Festival Internacional Cinematográfico de Moscú; Premio Catalina de Oro, del XX Festival Internacional de Cine, de Cartagena, en Colombia; Mejor actuación femenina en cine, en el primer Concurso de actuación de la Sección de Artes Escénicas de la UNEAC; Mención especial del Jurado en la Semana Internacional de Cine Iberoamericano; y   Premio a la mejor actuación femenina (otorgado por el público), en el Festival del Joven Cine., en Hyeres, Francia.

El cineasta dirigió, entre 1978 y 1987 el Departamento de Relaciones Internacionales del ICAIC; fue fundador del Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano, evento del que fue director durante las primeras 12 ediciones, y de la Escuela Internacional de Cine y Tv de San Antonio de los Baños.

En 1984, regresa al tema de la mujer y su relación con el matrimonio y el trabajo, en Habanera, con muy buena acogida de público y prensa especializada y nuevamente protagonizada por Daysi Granados y  el gran actor Adolfo LLauradó; en 1997 filma Amor en campo minado que obtuvo    Premio Sable de Plata, en el Festival Internacional de Filmes De Damasco, en Siria, en 1988; ese año también consigue el  Premio de la Federación Internacional de Críticos de Cine (FIPRESCI), en elFestival de Cine de Troia, en Portugal, donde Granados recibe   Premio a la mejor actuación femenina , entre otros.

A estas producciones le siguen las ficciones En el aire de1988;  Vidas de 1992; Entrevista con el asesino de 1993 y Las profecías de Amanda realizado en 1999, que fue elegido el Mejor Film., en el Festival de Cine de Cremona, en Italia, en el año 2000, en el que la actuación de Daysi Granados fuera multipremiada en Cuba, Brasil Colombia y Puerto Rico.

Pastor Vega, ofrendó  su carrera artística al cine cubano que tanto defendió desde diferentes flancos; su obra es perecedera  y frases de  Retrato de Teresa como « no para que te calentara la sopita» o «porque yo no soy una esclava, yo quiero ser yo coño, no una esclava», y una de las últimas, lapidaria, definitiva « ¿y si yo hubiera hecho lo mismo?», todavía se pueden escuchar para bien y para mal por la calles de Cuba.