¨En el sendero de mi vida triste hallé una flor

Que al verla su perfume delicioso me embriagó¨

Tal parece que el joven trovador Santiago Feliú presintiera su absurda muerte y quiso que su último cantar fuera destinado a perpetuar aquellas canciones añejas, pero siempre jóvenes, creadas por los patriarcas precursores de su generación trovadoresca.

Escuchó con atención los versos de aquellas canciones creadas para deleite y encantamiento de sus abuelos y le llamó poderosamente la atención el bolero de Oscar Hernández Falcón titulado ¨Ella y yo¨, donde en su primer verso alude al sendero de su vida, y decidió que su disco llevara el nombre de Senderos.

Santiago Feliú, ¨Santi¨, no pudo disfrutar del placer de escuchar el disco terminado pero trabajó intensamente con sus amigos en la grabación de lo que sería su último canto.

Cuando nos dijeron que Santiago Feliú había grabado un disco unos meses antes de fallecer, pensamos que sería algo así como una antología de sus creaciones más conocidas pero no, el prefirió cantar con voz propia y a su manera como trovador de su tiempo doce obras de renombrados autores de la trova mayor. El fonograma contiene catorce pero dos fueron interpretadas por otros de sus amigos, cómplices complacientes en la realización del disco.

De esta manera Abelito Acosta canta esa joya de la bolerística universal que es ¨Convergencia¨, de Bienvenido Julián Gutiérrez y Marcelino Guerra ¨Rapindey¨, mientras que el imprescindible Pepe Ordaz acomete con su acostumbrada maestría el bolero de Graciano Gómez y Gustavo Sánchez Galarraga ¨En falso¨. Todos los otros los canta ¨Santi¨ Feliú acompañándose de su guitarra y el Tres de Abel Acosta.

Resulta sorprendente y al mismo tiempo halagador que un trovador joven, asuma con amor la música de Salvador Adams, Sindo Garay, Pepe Bandera, Matamoros y otros grandes, pero es que así se hace valedera la afirmación de que la trova es una sola o ¨solísima trova¨ como afirma Silvio Rodríguez.

Algunos incrédulos, pocos por suerte, dicen que los jóvenes no quieren a las canciones creadas por los fundadores de la trova cubana. Una afirmación sin validez alguna, y este disco lo desmiente categóricamente.

Ya hemos visto, mejor dicho, escuchado como por ejemplo, en las unidades de jóvenes reclutas o en los ratos de descanso en los campamentos de los estudiantes en el campo los adolescentes entonan a viva voz ¨Quiéreme mucho¨ o ¨Pensamiento¨ con más de cien años de creadas, y es que la trova está tan firmemente enraizada en el sentimiento popular que resulta imposible desprenderla de la vida cotidiana del pueblo de cualquier edad.

Con este disco titulado ¨Senderos¨, Santiago Feliú se une a los que defendemos a cualquier costo la historia de la música cubana y como un cantor profundamente repleto de emocionado placer, acomete con amor las canciones que jamás morirán, porque viven y vivirán eternamente en el sentimiento de los que se empeñan en amar derramando en sus cantares todo el cariño depositado en sus corazones por aquellos empecinados juglares de antaño que nos legaron tanta ternura en sus trovadas.

Desde el infinito debemos dar gracias al amigo trovador que tan tempranamente se nos fue y a aquellos que se unieron a él para ofrecernos esa joya de la discografía cubana.

Nota:

Disco Santiago Feliú ¨Senderos¨. Canciones de la trova tradicional.

Grabado y masterizado en Estudios MB

Producciones Colibrí