El Coloquio Internacional València 1937 / La Habana 2017 Intelectuales, Política y Cultura quedó inaugurado en la Fundación Alejo Carpentier con la presencia de Abel E. Prieto, ministro de Cultura y de Graziella Pogolotti, presidenta de esa institución.

La doctora Pogolotti tuvo a su cargo las palabras de apertura en las que evocó la participación de Alejo Carpentier, Juan Marinello, Nicolás Guillén, Félix Pita Rodríguez y Leonardo Fernández Sánchez, en el II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura celebrado en el año 1937 en Madrid, Barcelona y Valencia, y clausurado en París.

«Los intelectuales más lúcidos de aquel momento sabían que en España se estaba defendiendo algo más que un régimen legítimo frente al pronunciamiento franquista; en   España se estaba dilucidando el destino de los años que habrían de seguir bajo el más terrible holocausto hasta entonces conocido, era el ensayo general de lo que vendría después», afirmó la reconocida intelectual cubana.

Más adelante aseguró: «Nosotros nos reunimos en estos días aquí, no para hacer un rescate arqueológico de aquel ayer, sino para retomar lo que tiene de vigente, en cuanto al papel que nos corresponde como intelectuales en defensa de la cultura, en uno de los momentos más dramáticos que vive la humanidad».

La presidenta de la fundación Alejo Carpentier instó a los participantes a pensar, reflexionar, debatir e intercambiar, durante los días del evento con vistas a «establecer los referentes indispensables para entender el mundo en que vivimos», señaló.

A estas palabras de la doctora Pogolotti le siguió la intervención de Abel Prieto, quien recordó al doctor Armando Hart, fallecido el pasado día 27 quien, aseguró, «fue un extraordinario intelectual y político cubano; un humanista en toda la dimensión de la palabra. El hombre de la Campaña de Alfabetización; el hombre de la rectificación de los errores que se cometieron en la política cultural».

Subrayó el ministro que el doctor Hart, con su quehacer incansable por la cultura y su poder transformador del ser humano, defendió «los ideales de aquellos que fueron a Valencia en 1937».

Coincidió con la oradora en que el presente es un momento de extremo peligro y se refirió al fenómeno de la información en el mundo, en el cual los individuos, y sobre todo los jóvenes, están sometidos a mensajes, supuestamente asociados a la cultura, que impiden su concentración; «tenemos que luchar contra la fragmentación, contra la desintegración, aquella palabra que el Grupo Orígenes, utilizaba siempre como una especie de amenaza satánica. Yo creo que estamos en tiempos de desintegración».

El titular de Cultura consideró la importancia del encuentro organizado por la Fundación Alejo Carpentier y la Universidad de Valencia, que se realiza 80 años después del Congreso de 1937, y destacó el concepto que lo define: «ver ahora qué vamos a hacer aquellos que tenemos posibilidades de usar la palabra, de promover el pensamiento», y citó a Fidel en un acto por el 150 aniversario del natalicio de José Martí, cuando expresó: «Sembrar conciencias, sembrar ideas».

Seguidamente declaró: «Es efectivamente lo que intentaron hacer aquellos que se reunieron en Valencia y lo que tenemos que seguir intentando hacer nosotros hoy, porque realmente el fascismo ya no se enmascara, cada vez es más impúdico, y el racismo, la xenofobia, el mesianismo imperial, son cosas que constantemente estamos viviendo cada vez en formas más grotescas».

Los organizadores del evento incluyeron en el programa de este primera jornada la conferencia “La ética de la escritura: escritores cubanos en la guerra civil española”, del crítico, ensayista y Premio Nacional de Literatura, Ambrosio Fornet, que fue leída por su hijo, el intelectual cubano Jorge Fornet.

El autor construye esta conferencia sobre las experiencias escritas por varios intelectuales cubanos y de otras latitudes participantes, tanto en la Guerra de España como en el Congreso de Valencia, entre ellos Pablo de la Torriente Brau, Alejo Carpentier, Nicolás Guillén, Félix Pita Rodríguez, José María Chacón y Calvo, Carlos Montenegro, Pablo Neruda y Octavio Paz.

Fornet va hilvanando estos textos hasta lograr un panorama muy abarcador del pensamiento más progresista de la época, el más preclaro y hace énfasis en la interpretación que dan estos escritores a ambos acontecimientos históricos; se detiene en la influencia que estos hechos ejercieron en sus posiciones ideológicas y políticas; para unos, explica, significó una transformación total de su pensamiento y para otros fue una reafirmación de sus ideales humanistas, independentistas y de justicia social.

Esa disertación fue presentada por Ambrosio Fornet en Burdeos, España, en el año 2004 y en opinión de la doctora Pogolotti, mantiene una total vigencia.

A continuación comenzaron los debates de las ponencias presentadas por José Martínez Rubio, de la Universitat Jaume I, Castellón: “La lucha por el discurso histórico. La Guerra de España frente a la Guerra Civil: una perspectiva internacional desde los años 30”; Armando Raggi, de la Fundación Alejo Carpentier: “Los diplomáticos cubanos ante el conflicto español: José María Chacón y Calvo, y Flora Díaz Parrado”; Alvar de La Llosa, de la Université de Lyon 2: “La acción cultural como compensación frente al fracaso de la diplomacia”, y Jaume Peris Blanes, de la Universitat de València: “¿Una imaginación antagonista? Cuando decir no, no basta”.

Hasta mañana sesionará este evento del pensamiento y el compromiso social de los intelectuales contemporáneos con su tiempo y con aquellos que supieron vislumbrar en 1937 el peligro por el que atraviesa la humanidad en el presente.

Publicado: 29 de noviembre de 2017.