Con un recordatorio especial a Raúl Ferrer en su centenario y la asistencia de representantes de cerca de diez provincias del país, desde este miércoles sesiona en la sala Martínez Villena de la UNEAC el Encuentro Nacional de Poesía, el cual se efectuará durante tres jornadas con el fin de dar continuidad a los acuerdos adoptados durante el VIII Congreso de la organización.

El intercambio de criterios acerca de la creación poética actual dentro de la Isla, la rica tradición que acumula aquí el género y el modo de acercar al pueblo sus mejores exponentes, figuran entre los objetivos de la cita, en la que también serán reconocidos algunos de los más prestigiosos cultores de dicha expresión literaria.

Precisamente el homenaje al Premio Nacional de Literatura Roberto Fernández Retamar y a Domingo Alfonso fue el preámbulo de la apertura oficial del evento, con las palabras de elogio pronunciadas por los también poetas Alex Pausides y Rito Ramón Aroche, respectivamente, los que valoraron en cada caso los aportes hechos a nuestras letras por quienes están próximos a celebrar 85 años de existencia.

Tal y como está previsto para las restantes jornadas, en la inaugural se desarrolló un panel en el que los investigadores Juan Nicolás Padrón, Virgilio López Lemus y Enrique Saínz se refirieron  al período de las neovanguardias poéticas, a los poetas de El Puente, a la poesía de los años setenta del pasado siglo y su salida del coloquialismo.

También como deberá ocurrir en los siguientes días, se produjeron lecturas de poemas, fueron presentadas algunas publicaciones periódicas, así como  uno de los materiales del proyecto audiovisual Visualeer, en el que el joven escritor y realizador J. R. Fragela logra una hermosa simbiosis entre imagen y texto poético.

Al dar la bienvenida a los participantes Alberto Marrero, presidente de la Sección de Poesía de la Asociación de Escritores de la UNEAC, señaló que las sugerencias que se realicen en el encuentro serán tomadas en cuenta en aras de alcanzar una mayor cantidad y calidad de lectores en el país, a los cuales el buen verso fortalecerá ante los cantos de sirena, la desidia y la mediocridad.