Mayo, este año, es el mes de la cultura francesa. Y La Habana recibe, en diversos rincones, la visita de importantes muestras de todas las manifestaciones artísticas. Las artes plásticas están representadas de lujo, con las obras de uno de los grandes pintores vivos del país europeo. Un hombre singular que en el tiempo, por casi 50 años, ha dejado sus mejores huellas creativas en los muros de disímiles ciudades, y rincones de su país y del mundo, para llevar el arte a la calle, y con él sus más caros anhelos y esperanzas, para que vibre en el seno del pueblo.

Les presento a: Ernest Pignon Ernest (Niza, Francia, 1940) quien es uno de los inventores del Street Art (Arte Callejero), y cuya obra llega a La Habana, por primera vez, en una exposición de dibujos titulada Retratos de músicos, inspirada en el Concierto Barroco de Alejo Carpentier. El proyecto organizado por Cuba Cooperación Francia en la Casa Víctor Hugo está auspiciado, además, por la Oficina del Historiador de la Ciudad y la Fundación Alejo Carpentier.

Inaugurada en la Casa Víctor Hugo (La Habana Vieja), en presencia del embajador de Francia, Jean-Marie Bruno, Bertrand Montagne, secretario general de Cuba Cooperación Francia y personalidades del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Retratos de músicos resulta un punto alto de estas jornadas, pues, entre grabados, fotografías y recuerdos, se habla de la amistad entre dos pueblos.

La historia comenzó hace casi 36 años, el día de la muerte de Alejo Carpentier. Allá en Francia, el célebre pintor galo, Ernest Pignon Ernest, recibió una llamada de la embajada cubana, en la que la viuda del gran escritor cubano lo invitaba a participar en los funerales en Cuba, pues según le explicó más tarde, Carpentier sentía admiración por su trabajo desde que conoció su obra en una muestra en el Museo de Arte Moderno de París (1978). Al regresar de la Isla caribeña, lo invitan al Festival de Jazz en Uzeste, en el suroeste de Francia, para exponer sus creaciones, y realiza una variación libre del Concierto Barroco de Carpentier. Puso manos a la obra, y creó 50 retratos de músicos importantes de todo el mundo. En esa efímera muestra se podía ver, desde el dibujo, a Bach “dialogando” con Jimi Hendrix, o a Claude Debussy junto a nuestro Joseíto Fernández, entre muchos otros de diferentes nacionalidades y géneros musicales… Se pegaron en las paredes del pueblo, y la inauguración se hizo al son de una fanfarria de jazz. Eso fue en 1982, y nunca más se volvieron a mostrar.

Renace el Concierto Barroco

Luego de más de tres décadas, un conjunto de aquellas interesantes creaciones vuelve a respirar en La Habana, gracias a Cuba Cooperación Francia, y a la labor, casi arqueológica, de la curadora/realizadora Agnes Legouze, también presente aquí, quien el pasado año nos obsequió, en este mismo espacio de la Casa Víctor Hugo, la muestra Tres mares (12. Bienal de La Habana). Y, por supuesto al interés del pintor Ernest Pignon Ernest, quien aceptó, con todas sus ganas, participar en este proyecto y prestar el material conservado en el tiempo.

Para conocer a Ernest Pignon Ernest, se puede decir que es uno de los máximos exponentes de las artes plásticas en Francia. Desde hace casi 5 décadas expone sus imágenes en las pieles de los muros de las ciudades, esbozando en ellos, desde aquellas primeras obras que denunciaban la utilización de las armas nucleares, la lucha contra el apartheid en Sudáfrica, el apoyo a los inmigrantes, la lucha por el aborto y muchos gestos políticos, hasta los retratos de célebres músicos, escritores y poetas, entre otras temáticas. Prefiere la serigrafía, pues hace un dibujo, lo multiplica y lo pega en las paredes… Es un artista, además, muy popular y comprometido con los movimientos revolucionarios de América Latina. Amén que sus realizaciones son efímeras por naturaleza, y solo entran en galerías y museos, en forma de dibujos preparatorios y fotos de sus instalaciones.

Retratos de músicos

Un paseo por la muestra Retratos de músicos, que estará abierta hasta el 9 de junio-, deja ver una serie de fotografías de momentos de los funerales de Alejo Carpentier, otras que grabaron los preparativos de la exposición en las calles de Uzeste (Francia), así como más de 30 retratos de aquellos 50 que vieron la luz en la década de los 80. Entre otros sobresalen los de Antonio Vivaldi, Igor Stravinski, Gustav Mahler, Edgard Varesse, Richard Wagner, Hector Berliotz, Billy Holliday, Luis Armstrong, Duke Ellington y Giuseppe Verdi, …

Las reproducciones, a gran escala, expuestas, donde se muestran retratos de músicos y compositores aludidos por Carpentier, en su Concierto Barroco, ese cuento filosófico dedicado a la música, sobresalen, por el minucioso y detallado dibujo, con el que Ernest Pignon Ernest delinea el rostro de cada creador, el pulso extremo con el que contornea la personalidad/expresiones de esos célebres artistas del mundo, matizadas entre luces y sombras, en un sencillo ambiente que transparenta la intención, de su autor, de llegar a todos, sin ningún “maquillaje” extra. En ellos, va inscrito, el ánimo popular que resalta en las creaciones de este pintor, que desborda de energía y amor por el pueblo.  Durante la muestra, se han organizado conferencias, presentaciones de libros y audiovisuales, que subrayarán los vínculos existentes entre las artes plásticas, la música y la obra del escritor cubano.

En estos días de mayo de la cultura francesa en nuestra Isla, Cuba Cooperación Francia, en coordinación con la Casa Víctor Hugo y la Oficina del Historiador de la Ciudad, auspiciará, también el Concierto Lírico Marie Galante, producido por la Asociación Francesa Musiques Interdites (Músicas Prohibidas). En el mismo participarán artistas franceses junto con músicos y recitadores cubanos, quienes interpretarán la música de Kurt Weill, en la sala Cervantes, en el Prado habanero, el día 18 de este mes.