Es la primera universidad creada en la región central del país. Fue fundada en 1952, y abrió oficialmente su primer curso el 30 de noviembre de dicho año. De esta forma quedaba materializado un viejo sueño de los jóvenes villaclareños. Fue declarada Monumento Nacional el 29 de septiembre de 2008.

Está ubicada al este de la ciudad de Santa Clara. Tiene doce Facultades y la Facultad Especial de Montaña, localizada en Topes de Collantes, el corazón de la cordillera del Escambray, zona que destaca por los bellísimos helechos arborescentes. 

Su nombre es un reconocimiento a la patriota y benefactora villareña Marta Abreu de Estévez (1845-1909). Marta Abreu fue una patriota cubana, que siguiendo su vocación y los deseos de sus padres destinó la fortuna familiar para las obras de beneficencia, escuelas e instalaciones públicas en Santa Clara.

También contribuyó con numerosos recursos financieros a la lucha por la independencia de Cuba. En 1874 se casó con el doctor y abogado Luis Estévez y Romero, quien apoyó también las actividades benéficas y patrióticas. 

De ella, el propio Generalísimo Máximo Gómez expresara:

“No saben ustedes los villaclareños, los cubanos todos, cual es el verdadero valor de esa señora […] Si se sometiera a una deliberación en el Ejército Libertador el grado que a dama tan generosa habría de corresponder, yo me atrevo a afirmar que no hubiera sido difícil se le asignara el mismo grado que yo ostento”. 

La universidad dispone de diversos valores que hacen de ella un símbolo de patrimonio civil. Entre estos se destaca el conjunto arquitectónico del campus universitario, el cual representó una solución funcional y orgánica con principios del movimiento moderno, donde predomina la relación entre la arquitectura y su entorno.

Entre otros de sus valores se encuentran contar con un Jardín Botánico, establecido desde 1956.

Un hecho decisivo acaecido en la Universidad y que trasciende fronteras, viene dado porque allí, en su antigua Facultad de Ciencias, hoy Sala de Historia, se instaló la Comandancia de Ernesto (Che) Guevara. Este lugar fue el centro de operaciones para la decisiva y heroica toma de la Cuidad de Santa Clara. Batalla que, combate a combate, fue tejiendo la hazaña; con este suceso se lograba que la isla de Cuba fuese cortada en dos, facilitando la dirección del golpe principal para la liberación definitiva de Cuba, objetivo dirigido personalmente por el Comandante en Jefe, Fide Castro Ruz.

La Universidad Central de Las Villas (UCLV) fue el primer punto ocupado por las tropas rebeldes el 27 de diciembre de 1958, dada su estratégica ubicación geográfica y dado el espíritu insurreccional que predominaba. También en este recinto universitario el Che ubicó un hospital de sangre como apoyo a la columna guerrillera. 

Un año después, el 28 de diciembre de 1959, en el primer año de la revolución triunfante, la UCLV le otorga al Che el título de Doctor Honoris causa en Pedagogía, pronunciando este uno de sus más trascendentales discursos sobre la nueva universidad que se requería en un país en Revolución.

El guerrillero heroico siempre se mantuvo muy vinculado a la Universidad, realizando la apertura de su curso 1961-62 y visitando en otras ocasiones el Centro. 

Donde estaba la Comandancia del Che, hoy se encuentra la Sala de Historia y en el aula de la antigua Facultad de Pedagogía, donde se instaló el hospital de sangre de la Columna No. 8, tiene su sede la Cátedra Honorífica "Ernesto Che Guevara", organizándose bienalmente el evento político y académico "La obra humana del Che".

Sus aulas tienen el privilegio de haber escuchado a ilustres profesores y científicos cubanos como Gaspar Jorge García Galló, excepcional pedagogo, cuyo saber hacia entendible el más complejo tema de filosofía; el Dr. Antonio Núñez Jiménez, considerado el cuarto descubridor de Cuba; Manuel Rivero de la Calle, relevante antropólogo, entre otros. 

En este alto centro docente, como en la Universidad de la Habana también hubo estudiantes revolucionarios que militaron en el Partido Socialista Popular, organización que jugó un importante papel en la lucha contra la tiranía. Entre ellos se hallaban, Antonio Larralde, Ramón Pando Ferrer y Reinaldo Fundora, Desde 1955 se creó la FEU en este Centro, muy vinculada a la organización estudiantil de la Universidad de la Habana. En sus talleres se imprimieron periódicos clandestinos como “Sierra Maestra” y “Escambray”. Producto de la situación vivida en el país en los años 1957 y 1958 las actividades docentes de la Universidad permanecieron clausuradas.

El verdadero desarrollo de la UCLV se llevó a cabo a partir de 1959, con la ejecución de la Reforma Universitaria y una profunda transformación esencial en la enseñanza, en la formación de profesionales de nuevo tipo y por su vinculación con las prioridades del desarrollo social y económico del país. 

En las décadas de los 60’ y 70’ se amplió su perfil de carreras, se orientó su desarrollo hacia las necesidades de la sociedad y se consolidó el modelo de formación del profesional. 

En la primera mitad de la década de los 80’ se fortaleció la inserción de la Universidad en la producción, los servicios y el trabajo social y a partir de 1986, se potenció su conversión como Centro de Investigaciones, puesto en función del desarrollo nacional y la avanzada científica. 

En la década de los 90’ mantuvo su desarrollo ascendente, aplicando fórmulas creativas para sobreponerse a las restricciones económicas del período especial, basándose en la unidad de los miembros de la Comunidad Universitaria, lo que le ha permitido mantenerse en la avanzada de la formación de profesionales, el postgrado y la actividad científico-tecnológica entre las universidades del país. 

En la Universidad Central “Marta Abreu” de Las Villas, se estudian más de 50 carreras que abarcan las ciencias humanísticas, las técnicas y las naturales. Además, ofrece 29 programas doctorales, 44 programas académicos de Maestría y 4 especialidades. En 2016 se le otorgó la condición de Excelencia.

Existen cinco centros de investigación y 10 centros de estudios que desempeñan un importante papel en el desarrollo científico de la institución. Hay cuatro adscriptos al nivel universitario y el resto a las diferentes facultades. Sus resultados contribuyen al desarrollo económico y social de la provincia.

Entre otros de sus aportes se encuentra su contribución a la conservación del patrimonio académico universitario, en realidad poco divulgado por los medios de comunicación del país. Fenómeno no solo encontrado en esta universidad central.

Donde exista vida hay historia, herencia y patrimonio que identifica, y les da un sentido de pertenencia a las personas, por lo que divulgar lo más ampliamente posible los valores que hacen de uno, ser humano, no es solo útil, sino obra necesaria a acometer por toda la sociedad.

Todo lo que porta de valores la universidad Central de Las Villas, desde el por qué de su nombre, de su gente y de sus actos es uno de esos casos a irradiar.