Organizar actividades de interés popular sobre la base de la generalización para conquistar a la mayor parte de los grupos etarios es una virtud que exhiben muchos artistas, profesionales y aficionados, de nuestro tiempo. Del municipio artemiseño de Güira de Melena, Teresita Sánchez Roque es una de las creadoras que se ha entregado en cuerpo y alma a la magia de las artes, y ha volcado su amor por las distintas manifestaciones sobre las personas con las cuales interactúa comúnmente.
Esta güireña es conocida por la jocosidad que imprime a sus pinturas de arte naif y a sus creaciones con papier maché, perfeccionadas todas a partir de los conocimientos que recibió al graduarse de instructora de Artes Plásticas, al alcanzar la licenciatura en Pedagogía en Educación Plástica y también por ser miembro de la Academia Cubana de Artesanos Artistas (ACAA).
Lograr capturar fragmentos de la vida cotidiana, o de los sueños, tal vez irrealizables, llevarlos a un pedazo de papel y decorarlos luego con el brillo mágico con que cuenta su inspiración de mujer es una de las habilidades de la artista.
Sus obras se ven condicionadas constantemente por sus vivencias personales y por todas las actividades y eventos en los que se inserta protagónicamente Tere, como la llaman muchos cariñosamente. Y es que, revoloteando por aquí y por allá, esta mujer güireña cumple con las clásicas obligaciones de su hogar, pero también se inserta en la sociedad mediante exposiciones, como por ejemplo Verticalmente horizontal, Reflejos de la ciudad, Soy Artemisa y Convergencia.
Además, Tere se entregó a la inquietud de imbricar lo útil, lo productivo, lo entretenido y la actividad sana para la población. De su afán de cumplir su propósito nació el Proyecto Sociocultural Comunitario Vuelo de Papel.
Con casi una década de existencia en el municipio artemiseño de Güira de Melena, la coordinadora principal, Teresita Sánchez, abogó desde sus inicios por imprimirle un sello distintivo, matizado por las realidades sociales en las que se ha materializado Vuelo de Papel.
Trasmitir a los niños el trabajo con las piezas y las habilidades para la creación en el espacio de la comunidad figuró entre las primeras apetencias del Proyecto. Durante casi una década de existencia, sus participantes han incorporado ideas y estilos propios a partir del conocimiento y las técnicas de papier maché adquiridos, con frutos en la productividad diaria, en los concursos y exposiciones en las que participan sus integrantes, incluso con representaciones en países como Ecuador, Perú y México.
A raíz de las necesidades de aislamiento social por la COVID-19, se le agregó al Proyecto la artesanía popular tradicional. Ahora participan no solo niños, en esta nueva fase también se insertan jóvenes y adultos, sobre todo de la tercera edad.
Pie foto: Trasmitir a los niños el trabajo con las piezas y las habilidades para la creación en el espacio de la comunidad figuró entre las primeras apetencias del Proyecto. Fotos:Corteía de la Autora
Con esta variante la artesanía se diversifica a partir del trabajo con hojas de maíz, de plátano, hilo, hilo engomado, fomi y con artículos reciclados que renacen a partir de nuevos usos, sobre todo con la finalidad de convertirse en útiles para el hogar.
De acuerdo con la realidad que vivimos en medio de la actual situación epidemiológica, Vuelo de Papel aprovechó espacios como los vacunatorios para mostrar su quehacer: las distintas manualidades fueron expuestas ante la población que asistía al proceso de vacunación, aunando el procedimiento médico con el aprendizaje artístico.
Vuelo de Papel ha madurado en sus distintas facetas hasta extenderse por el municipio, atrayendo federadas que proponen y enseñan sus habilidades, entre ellas el tejido con estambre. Sus creaciones trascienden el espacio que propone Tere, llegan a exposiciones e, incluso, quedan adornando el mundo en que vivimos.
Este proyecto sociocultural y comunitario ha cumplido su propósito principal: para crear, cada hogar se convirtió en taller de artesanías y dio riendas sueltas a la imaginación en un “Vuelo de Papel” para alimentar el alma.
Deje un comentario